Drancy Camp
El campo de Drancy, en las afueras de París, era conocido como la "antesala de Auschwitz" debido a las muchas y frecuentes deportaciones hacia los campos de exterminio. El campo de Drancy había sido construido para alojar soldados y estaba formado por edificios de cinco pisos en forma de "U". Pero a partir de los arrestos masivos de judíos en París, en julio de 1941, Drancy se convirtió en un campo "judío", administrado consecutivamente por tres oficiales de la SS que estuvieron a cargo de los asuntos judíos durante toda la guerra.
Durante los primeros meses, el campo sólo alojó a hombres judíos --franceses nativos o extranjeros-- que habían sido arrestados en redadas llevadas a cabo en los diversos barrios de París. De allí pronto salieron cuatro deportaciones hacia el este. Más tarde aumentó en gran medida el número de arrestos y deportaciones -- 40.000 personas fueron enviadas en cuarenta deportaciones.
Las víctimas de la redada masiva del 16 de julio de 1942, que habían sido llevados al Estadio de Invierno de París, cambiaron la población de Drancy. Por primera vez entre los internos había mujeres y niños - aunque los maridos eran abruptamente separados de sus mujeres, y frecuentemente sin tener tiempo para dividir las magras pertenencias que habían traido consigo.
Después de esta redada, la población del campo aumentó notablemente y el nivel de alimentación empeoró. Pero las privaciones y la desesperación nada significaban frente a las crueles escenas que acompañaban las deportaciones, que comenzaron nuevamente el 19 de julio de 1942, tres días después de la redada. De allí en adelante se llevaron a cabo deportaciones a ritmo regular: tres por semana. En agosto de 1942 llegaron al campo desde Beaune-La-Rolande y Pithiviers aquellos niños de dos a doce años cuyos padres ya habían sido enviados al este. Los transportaron en ómnibus, donde los chicos mayores hacían lo posible por cuidar de los más pequeños. En Drancy, los niños fueron trasladados a vagones sellados y enviados al este.
El campo de Drancy estaba administrado de acuerdo con el sistema nazi de los campos de concentración. Con cruel cinismo, el comandante del campo frecuentemente utilizaba a los internos judíos en la administración del campo. Entre otras misiones, a los internos que tenían a sus familias en el campo se les ordenaba que trajeran a otros judíos que estaban viviendo clandestinamente en París. Si no lo hacían, ponían en peligro las vidas de sus familiares, que habían quedado en calidad de rehenes.
Los internos de Drancy estaban casi completamente apartados del mundo exterior. No podían abandonar los edificios e ir al patio, excepto por unas pocas horas en las que tenían permiso para hacerlo. La razón para ello era que esta zona estaba siempre llena de gente: grandes grupos de recién llegados o deportados. La disciplina era extremadamente estricta, y los castigos a los que sometían a quienes rompían las reglas eran brutales. A veces el castigo era sumamente irritante, como por ejemplo la prohibición de mirar por la ventana o de fumar.
(Dra. Pnina Rosenberg)